El dinero que se guarda en un banco, por ejemplo en una cuenta de ahorro, se denomina «depósito». El modelo de negocio de la mayoría de los bancos consiste en prestar ese dinero a otros clientes, manteniendo solo una parte a disposición de las personas que deseen retirar efectivo. Para asegurar la protección de gran parte de estos depósitos incluso en caso de quiebra, los bancos participan en un fondo de seguro conocido como «fondo de garantía de depósitos». Esto es importante para preservar la confianza en el sistema bancario y disuadir a los clientes de retirar sus ahorros al mismo tiempo en momentos de tensión. ¿Cómo funciona la garantía de depósitos? Actualmente los sistemas de garantía de depósitos en Europa se organizan a nivel nacional, aunque se han acordado normas mínimas a escala de la UE, que prevén una cobertura de 100.000 euros por depositante. En algunos Estados miembros se aplican normas diferentes para cada categoría de banco, por ejemplo, cajas de ahorros, cooperativas de crédito, bancos públicos o bancos privados.
Si un sistema nacional de garantía de depósitos no pudiera hacer frente a las pérdidas de los depositantes en caso de producirse una gran quiebra bancaria, podría ser preciso recurrir al dinero de los contribuyentes para cubrir los importes necesarios, lo que perjudicaría a las finanzas públicas. La crisis financiera ha demostrado que los problemas de los bancos no se detienen en las fronteras nacionales. La respuesta europea a la crisis financiera consistió en avanzar en la integración para proteger a los contribuyentes y a los titulares de depósitos. En el contexto de la unión bancaria, la supervisión de los grandes bancos, que en conjunto poseen más del 80 % del total de activos bancarios en la zona del euro, se realiza ahora de manera armonizada en toda la zona del euro a través del Mecanismo Único de Supervisión, formado por el BCE y los supervisores nacionales. Asimismo, el Mecanismo Único de Resolución se encarga del proceso de reestructuración ordenada de las entidades declaradas inviables o previsiblemente inviables.
Los líderes europeos están discutiendo cómo podría organizarse un sistema de protección más fuerte y más uniforme a nivel europeo. Se trata del último pilar necesario para completar la unión bancaria. Un sistema europeo de garantía de depósitos sería una manera de proteger a los depositantes con independencia de dónde estén. La puesta en común de recursos permitiría gestionar de forma más sencilla perturbaciones fuertes o crisis financieras sistémicas que superen las capacidades nacionales, sin necesidad de recurrir al dinero público. Un sistema de este tipo también debilitaría el vínculo entre los bancos y sus gobiernos nacionales, ya que los bancos dependerían menos del dinero público en caso de crisis. ¿Cómo funcionaría el sistema europeo de garantía de depósitos? La Comisión Europea propuso que el sistema europeo se introduzca por etapas. Se necesitarían varios años hasta que las aportaciones bancarias al fondo de garantía de depósitos alcanzaran el objetivo del 0,8 % de los depósitos cubiertos.
Métodos de pago: ¿qué son y qué diferencia hay entre ellos? Con el auge de las plataformas digitales se diversificaron los medios de pago. Hacemos un repaso por algunos tradicionales y otros más novedosos. Ya sea que vamos a comprar un producto físico (ropa) o un servicio (telefonía) lo que no cambia es que debemos pagar por ello, aunque lo que varía es que se pueden elegir diferentes opciones a la hora de concretar la transacción. Puede realizarse mediante dinero en efectivo, tarjeta de crédito, tarjeta de débito, cheques o transferencia bancaria, entre otras. O sea: diferentes métodos de pago. Bueno, todos estos son métodos de pago, que son las diferentes alternativas que tiene una persona para pagar una compra. Se podría decir que, finalmente, los métodos de pago son la forma en la que viaja el dinero al momento de adquirir bienes, servicios y/o cancelar diferentes tipos de obligaciones.
¿Por qué se eligen diferentes métodos de pago? Todas estas cualidades se manifiestan en una diversidad amplia de métodos de pago y cada puede ser más o menos apta dependiendo el tipo de transacción, por ejemplo, seguro haz escuchado que cuando la Familia Morada viaja al extranjero prefiere pagar con su Moradita que con efectivo. Tan pronto completes una transacción con tu Moradita en el extranjero, es posible ver, en la propia aplicación Nu, una proyección del valor final de ese gasto en Pesos MXN. Además, el valor de cotización utilizado para la conversión ocurre en el proceso de compra, no en el cierre de la factura. Así que pagas con el tipo de cambio oficial del momento (Banco de México), no posterior. Es decir; si el dólar (cotización de la moneda) varía entre el proceso de compra y el pago en la factura, no pasa nada. Las compras que realices fuera de México las puedes diferir seleccionando la mensualidad que más te convenga, con una tasa de interés fija y transparente.