En este artículo vamos a hablar sobre depósitos bancarios, tipos y aspectos a tener en cuenta. Se consideran depósito bancario el dinero que los clientes depositan en una entidad bancaria con el propósito de tener allí guardado el dinero con el motivo que sea (como ahorros, para realizar transacciones o bien para recibir intereses). ¿Qué son los Depósitos Bancarios? Los depósitos bancarios los utilizan los bancos para ofrecer préstamos y realizar inversiones haciendo que funcione todo el sistema financiero. Otro aspecto clave del funcionamiento de los depósitos bancarios es el conocer todas aquellos procedimientos que se originan en la relación entre entidades bancarias y clientes. Generación de intereses en el caso de aquellos depósitos bancarios que supongan un abono de intereses por parte de la entidad bancaria. Gestión y seguimiento de la cuenta: Todas aquellos recursos (app, acceso en línea, extractos de la cuenta impresos, etc..) que la entidad bancaria pone a disposición del cliente para que éste último tenga acceso a la cuenta y pueda consultar su estado y/o realizar otras gestiones como actualizar dirección, agregar beneficiarios, etc..
Cierre de cuenta: Cuando se opta por cerrar la cuenta el cliente deberá realizar las gestiones que la entidad bancaria indique y según el tipo de cuenta cumplir con las condiciones y/o cargos que se hayan pactado. Cuenta Corriente: Es el tipo de depósito más común. El cliente deposita su dinero en la entidad bancaria y desde ese depósito puede realizar transacciones, pagos, retirar e ingresar dinero. Las cuentas corrientes no suelen generar intereses relevantes. El depósito a la vista muy parecido a una cuenta corriente pero con requisitos específicos y restricciones. Por ejemplo los depósitos suelen requerir un importe mínimo de apertura, son menos flexibles en relación a la cancelación, permanencia etc.. A cambio del depósito de dinero el cliente recibe una remuneración (interés) a cambio de una remuneración a un tipo de interés previamente fijado. El abono de intereses puede realizarse tras terminar el plazo de forma íntegra o de forma periódica durante el plazo que dure el depósito.
Los plazos suelen ser más flexibles que los de las cuentas de ahorro y pueden tener unas condiciones de retiro de dinero más amplias en función de los plazos de vencimiento. El Depósito a plazo fjo de BBVA incluye la posibilidad de disponer de lo invertido en el depósito antes de que pase el plazo acordado si bien se aplicará una penalización o una comisión (según contrato). Consultar condiciones. Para obtener información específica sobre la remuneración de los depósitos a plazo fijo en BBVA y las condiciones actuales, recomendamos comprobar información actualizada o bien contactar con la entidad bancaria. El depósito a plazo fijo de también permite retirarlo antes de la fecha de vencimiento pero es también con la penalización que se determine en contrato. Ahora mismo Bankinter, ofrece depósitos con diferentes remuneraciones, pero distintas características. Consultar condiciones. Para obtener información específica sobre la remuneración de los depósitos a plazo fijo en Bankinter y las condiciones actuales, recomendamos comprobar información actualizada o bien contactar con la entidad bancaria.
El Banco Santander, ofrece a través de su plataforma digital Openbank depósitos a plazo fijo con una remuneración del 2,75% TIN si se domicilia la nómina y del 1,75% TIN sin domiciliación. Consultar condiciones. Para obtener información específica sobre la remuneración de los depósitos a plazo fijo en Banco Santander y las condiciones actuales, recomendamos comprobar información actualizada o bien contactar con la entidad bancaria. En este tipo de depósitos la tasa de interés no es fija sino que fluctúa a lo largo del tiempo según determinados índices y variables de referencia. Esto supone beneficios relacionados con la posibilidad de ganar más, pero también de ganar menos. El rendimiento de un depósito a interés variable conlleva una mayor incertidumbre. Se trata de un producto financiero similar a los depósitos a plazo fijo con la diferencia de que el dinero que se invierte es en una moneda diferente al euro. Es un tipo de producto financiaro pensado para personas o empresas que manejan transacciones internacionales o desean diversificar sus activos en moneda extranjera.